Cuando sientas en tus espaldas,
la pesada carga de la decepción
y veas la felicidad brillar lejos,
desterrando euforia, alegrías,
mientras se deshoja tu vida
y no amanece en tus ojos, el sol.
Cuando la soledad marchite sonrisas
en tu rostro sin emoción,
cuando se adormezca tu alma,
en el camastro endeble de la nostalgia
y ya no te abriguen las caricias del amor,
mi amistad te estará esperando
en el ocaso de cada atardecer,
mientras tu mundo siga girando
aunque tu corazón desdichado,
jamás pueda volver a querer.
Fabián Pupilli
QUE HERMOSO CANTO A LA AMISTAD, A LA TERNURA DE TENER UN AMIGO INCONDICIONAL, DEJO MI SALUDO DE AMISTAD
ResponderEliminar