Porque en algún punto coincidimos...

martes, 31 de julio de 2012

EL MANTEL


Aquel cajón recién abierto abriga un tesoro, ya lo había olvidado…
Atrás en el tiempo, recuerdo el día en que ella con su cabeza reclinada sobre la mesa, acariciaba la tela celeste con fino bordado de pétalos blancos; sin alzar la mirada dijo: – cuántos recuerdos!-.
Pasaba su mano sobre el lienzo una y otra vez, como diciéndose a si misma:
-Mi madre quiso que integrara el ajuar, debía guardarlo para cuando me casara y usarlo al tener invitados, fue casi una imposición.
Este mantel es testigo del vuelo del tiempo, vistió la alegre mesa familiar, bautismos, aniversarios, fiestas navideñas, llegada de parientes lejanos, reunión de amigos; él sabía que cuando me acercaba a su refugio, sería protagonista de un acontecimiento importante.
Siempre dispuesto salía de su quietud reviviendo al compás de bulliciosa alegría.
Soportó platos calientes, bebidas derramadas, pequeñas manos melosas, manchas resistentes, el arrojo al fondo de un canasto, restregadas enérgicas y agitadas tendidas al sol, sabiendo sería puesto incólume hasta un próximo festejo.
También fue despositario de manojos de lágrimas cuando la despedida dejaba herido el corazón.
Al cobijo de una casa campesina fue bordado en noches de invierno a la tenue luz de un farol. El jabón blanco quitó suciedades, agua con almidón fue acondicionador y las arrugas fugaban mediante un alisado milagroso regalado por una “moderna”plancha a carbón.
Una vez cumplido el rito, volvía a su lugar, una y otra vez mientras el tiempo, verdugo cruel, desmejoraba su color, afinaba el género y reemplazábalo por modernos y coloridos que no requerían tanta labor.-
Pero él siguió allí, en su perpetuo refugio de aroma amaderada, teniendo de compañía a ésas atrevidas, diminutas e irregulares pelusillas.
Hoy su hacedora con manos apergaminadas y cabellos de plata, lo desplegó sobre la mesa junto a todos sus recuerdos, al posar en él la opaca mirada, su historia emerge como película en plano secuencia.

1 comentario:

  1. Y es verdad, en casa tenemos uno que es especial para los momentos históricos familiares, que relato tan lleno de ternura, cuando deslizó los dedos sobre ese mantel me pareció ver a mi bubu (mi mamá) haciendo ese mismo gesto.... besos y gracias por tu visita y tu saludo en mi faro ^^

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